El proceso de selección de personal es indispensable para tu empresa puesto que son los empleados quienes te ayudarán a conseguir los objetivos previstos. Existen muchas formas de reclutamiento dependiendo de los objetivos de cada empresa.
La selección de personal es el proceso que se sigue para contratar un empleado. Este proceso es la herramienta aplicada por la dirección de la empresa con el fin de diferenciar aquellos candidatos cualificados de los que no lo están.
Se inicia desde que alguien se postula para una vacante o cuando el reclutador encuentra un perfil interesante y termina con la contratación de un nuevo compañero de trabajo.
El reclutamiento es una actividad para establecer contacto entre empleados y solicitantes con el fin de reunir un gran número de candidatos para un trabajo, mientras que la selección de personal sirve para elegir a los trabajadores más adecuados para una organización.
Las razones por las cuales es fundamental contar con un buen proceso de selección:
Conseguir trabajadores cualificados: ayuda a contratar solo a candidatos deseables.
Reducir el coste de la formación: contrata empleados buenos en la comprensión.
Resolución de problemas de personal: se reducen los problemas de rotación.
Fases de un proceso de selección de personal
Identificación de necesidades: es el primer paso de un proceso de selección. Cada búsqueda de candidato está asociada a una necesidad a cubrir.
Estas pueden ser permanentes, puntuales, de futuro o temporales, por eso los departamentos de Recursos Humanos hacen un trabajo activo y periódico.
Búsqueda de candidatos: una vez evaluadas las necesidades, lo siguiente es la búsqueda del perfil ideal dentro de los candidatos. El método clásico es la publicación de ofertas aunque también se puede recurrir a la gamificación o las redes sociales con el objetivo de hacerse con una terna de candidatos.
Preselección: los profesionales de Recursos Humanos filtran candidaturas en función de diversos conceptos como habilidades o experiencia. No solo interesa la cualificación del candidato sino también las llamadas “soft kills”.
Prueba: las pruebas son el modo de cerciorarse de que el candidato sea el adecuado mediante test basados en la gamificación o pruebas técnicas. Este paso cada vez es menos frecuente debido a las limitaciones de tiempo real en durante el proceso.
Entrevista: se trata de la fase más importante del proceso de selección. Empresa y candidato se encuentran frente a frente, evaluando gestos y respuestas. Esta entrevista la llevará a cabo un profesional cualificado de Recursos Humanos.
Toma de decisiones: esta parte es complicada porque decide el futuro de la empresa. Lo candidato ideal ha de responder de modo eficiente a los requerimientos del puesto o de la actividad demandada.
Contratación: se comunica al candidato la decisión y aparecen las acciones informativas sobre contratos, situaciones legales y filosofía de la empresa. En esta fase se comprobará si la empresa ha acertado con el candidato, el cuál deberá leer y aceptar las condiciones contractuales.
Incorporación: el candidato tiene que sentirse apoyado y acompañado con las mayores facilidades posibles para una buena adaptación. La presentación de compañeros y oficinas son puntos importantes para elevar la motivación del nuevo empleado.
Formación: dependiendo del perfil del trabajador, la formación es de vital importancia. No solo las propias de su tarea concreta sino también las que se dirigen a futuras estrategias de negocio.
Seguimiento: la última fase consiste en conocer el rendimiento y adaptación del candidato y la obtención del feedback por parte del trabajador. Todas estas fases han de estar presentes en los procesos de selección para que el resultado sea el esperado.
Externalizar los procesos de selección de personal
La externalización de la selección de personal consiste en contratar el proceso a una compañía externa especializada en la búsqueda de candidatos. Actúa como intermediaria entre la empresa y los profesionales, los cuales son seleccionados escrupulosamente gracias a la infraestructura especializada con la que cuentan.
Esta empresa especializada es la que capta, recibe y filtra los diferentes perfiles y las valoraciones sobre ellos. Cuando se trata de contratar personal directivo es necesario contar con estos intermediarios.
De no haber personas especializadas en RRHH, es preferible externalizar el servicio.
Las ventajas de recurrir al outsourcing de procesos de selección de personal pasan por el ahorro de tiempo, el alivio de carga de trabajo, la objetividad en la selección o el uso de tecnologías de búsqueda de candidatos.
La selección de personal in-house
Esta técnica de selección de personal funciona mediante un consultor que se desplaza a las oficinas del cliente que está comenzando el proceso de selección para trabajar junto al departamento de Recursos Humanos de la empresa.
El modelo in-house permite a las empresas de gran volumen de trabajadores gestionar las necesidades de recursos humanos desde sus mismas instalaciones. El consultor coordinará y gestionará la disposición de los trabajadores, así como se ocupará de su selección, formación y planificación.