Claves de la contratación temporal en la empresa
Un contrato temporal es un acuerdo en donde se comienza una relación laboral entre la empresa y una persona por una duración determinada. Tiene una función particular y por lo general hace una actividad muy específica, pero aun así necesita ser contratado y ser dado de alta en la seguridad social.
La contratación temporal tiene un fin: generar trabajo cuando ocurra una eventualidad o se necesite personal de refuerzo, lo que no implica un contrato a largo plazo, ni tener a un empleado trabajando como fijo, solamente en la duración prevista.
Por eso, para tener relaciones justas y que realices las contrataciones correctas sin confusiones y dando de alta en la seguridad social, aquí te contamos cómo se realiza una contratación temporal para una actividad normal, y las diferentes modalidades de contratación.
¿Cuánto tiempo se puede contratar a un empleado temporalmente?
Un contrato temporal o también llamado contratos de duración determinada, tiene una duración máxima de 3 años según la legislación española, pero puede extenderse a 4 años en caso de estar de acuerdo ambas partes.
Sin embargo, la duración máxima de este contrato eventual no suele ser tan extensa. Por lo general, un contrato laboral se realiza en periodos de 6 meses a 1 año, teniendo en cuenta que son actividades específicas o de circunstancias concretas, las cuales por lo general involucran la realización de un proyecto que solo tarda algunos meses en concretarse y así, finalizar la relación laboral.
En todo caso, el proyecto puede renovarse, extenderse o necesitar una etapa de mantenimiento y que eso implique un mayor tiempo de empleo de la persona trabajadora, y se puede ejecutar un encadenamiento de contratos.
Puede haber una cláusula que especifique la posibilidad de que el contrato se prorrogue una vez. Si pasados 4 años aún hay la necesidad del empleado, entonces ya existe la necesidad de un puesto más estable que necesita un contrato indefinido o contrato fijo.
¿Por qué razones debo hacer un contrato temporal a un trabajador?
Hay diferentes momentos en donde tendrás que buscar personal que pueda cumplir con una plaza vacante (por emergencia, por una nueva necesidad o sustitución) y que esté dispuesto a trabajar durante una duración determinada hasta que la relación laboral ya no sea necesaria:
Vacaciones, permisos de maternidad o incapacidades
Este es uno de los casos más frecuentes donde deberás ofrecer un contrato de duración determinada en tu empresa. Se entiende que van a suplir el puesto de otros trabajadores fijos, los cuáles están ausentes por diferentes circunstancias, de duración reducida y hasta la extinción del contrato.
Si bien, en estos casos también podrás asignar las tareas de la persona sustituida a alguien con un contrato fijo, es difícil que ésta persona trabajadora asuma dos puestos y tenga la misma productividad que antes. Lo mejor es que contrates una nueva persona y tenga una formación profesional.
Si es un contrato por circunstancias, y, en definitiva, de emergencia si por ejemplo un trabajador fijo sufre un accidente o un parto adelantado, en este caso es recomendable contratar a alguien para que dé cobertura definitiva, en forma de un contrato de duración máxima de tiempo.
En temporada alta
Más trabajo también es sinónimo de mayores ingresos y la necesidad de contar con más personas trabajadoras. Por eso, es importante que te anticipes a tu necesidad según la naturaleza de tu producto o servicio, para saber cuándo vendrá en temporada alta, planificando así tus contratos de duración determinada.
Para esa época del año, tendrás que buscar a personas trabajadoras en la modalidad de contratos temporales, entendiendo que estarán ayudando a cumplir con todas las actividades extras, pero no cumplirán un cargo con responsabilidades o que se ejecute en todo el año, a pesar de ser contratos por circunstancias pero a jornada completa.
Para una obra nueva
En los casos donde sí vas a necesitar a un profesional especializado que asume grandes responsabilidades, especialmente cuando vas poner en marcha un proyecto nuevo. Esto tiene la característica de un servicio determinado y de duración determinada para su finalización.
En el desarrollo de softwares, webs o tecnologías
Para crear el sitio web de tu empresa, una aplicación, un sistema para llevar la administración e incluso diseñar herramientas exclusivas para el uso en tu empresa, tendrás que contratar temporalmente a profesionales en el área.
Aunque estos sean aspectos que puedan requerir mantenimiento constante, puedes pedir al mismo desarrollador que te cree una forma de administrar y gestionar el sistema, o que forme a alguno de tus empleados para que lo haga.
Tipos de contratos temporales
En España, existen ahora mismo solo 2 tipos de contratos temporales según la reforma laboral y modalidad contractual, y para que la contratación temporal pueda producirse, se deben cumplir con estas 2 características y con los convenios colectivos:
- Contrato de circunstancias de la producción: se firma si se presenta un incremento de la producción, ya sea de forma previsible (esperando una temporada alta) o imprevisible (cuando surgen picos ocasionales).
- Contrato de sustitución: se realiza para suplir a una persona eventualmente hasta que se reincorpore, mientras está en un tiempo de selección (que no puede ser más de 3 meses) para un cargo fijo, o para completar la jornada de otra persona a la cual se le redujo.
Los trabajos temporales por proyectos también son válidos, pero pueden conocerlos más específicamente como contratos por obras o hasta fin del servicio. Así, y ahora que no se te ha escapado ningún detalle al respecto… ¿Estás listo para ofrecer un contrato temporal y darlo de alta en la seguridad social?